Biblioteca online: libros libres

Hecho con Padlet

viernes, 13 de julio de 2018

Jornadas victorianas.

Este año se conmemora el I Centenario del nacimiento de Emily Brontë, por lo que hemos decidido celebrar unas Jornadas Victorianas en el centro con las que acercar a los alumnos no solo a la figura de Emily Brontë sino también a la interesantísima cultura victoriana.

Selección de libros de la época
El primer paso ha sido la creación de un corcho virtual con diversos post-it acerca de variados temas relacionados con esta época: medicina, literatura, vestimenta, costumbres, etc. Para ello hemos utilizado el servicio de Padlet, que permite realizar corchos colaborativos. De este modo los profesores que se unieron al proyecto tenían la posibilidad de colaborar añadiendo información interesante. Aquí os dejo el enlace al padlet.

Después de facilitar el padlet al alumnado, propusimos varios proyectos en función del curso. Los alumnos de 1º de Bachillerato formaron grupos de trabajo y eligieron un tema para desarrollar, ampliar y exponer la información al resto. Para favorecer la motivación hacia el proyecto, se propuso a los alumnos que no solo eligieran el tema, sino también el cauce de presentación, de manera que cada grupo decidió el producto final que quería crear para exponer a sus compañeros. Estos resultaron de lo más variado, desde una dramatización entre personajes de la época, videos diversos, presentaciones digitales, un periódico con noticias del momento e incluso una página web que vendía trajes de la época.

Dos alumnos victorianos
Además, los alumnos debían realizar carteles digitales que ilustrasen sus temas. De todos los carteles realizados se hizo una selección y se combinaron algunos para enviar a la imprenta diez de ellos con los que ilustraríamos las Jornadas. Dejo aquí el enlace a todos ellos por si le sirve a alguien.
Alumna sufragista
Cartel 1
Cartel 2
Cartel 3
Cartel 4
Cartel 5
Cartel 6
Cartel 7
Cartel 8
Cartel 9
Cartel 10
Una recompensa golosa tras un día duro

Los alumnos de ciencias elaboraron una genial maqueta de cómo podía quedar el esqueleto de una mujer tras el uso prolongado del corsé. Algunos alumnos de cuarto decidieron dramatizar la postura de todos los sectores de la población ante la publicación de El origen de las especies de Darwin.
La verdad es que fueron dos días muy intensos en los que los alumnos trabajaron sin descanso exponiendo sus temas al resto de alumnado del centro.










domingo, 25 de febrero de 2018

Cumbres borrascosas, Emily Brontë.


Este año se cumplen doscientos años del nacimiento de Emily Brontë y como creo que la mejor manera de rendir homenaje a un escritor es leer sus obras, acabo de terminar de releer la más famosa de las novelas de las hermanas Brontë, Cumbres borrascosas. 

La historia es relatada casi en su totalidad por el ama de llaves, Elena Dean, quien irá desvelando los entresijos de la historia familiar de los personajes de dos casas vecinas, Cumbres Borrascosas y La granja. Heathcliff es un niño pordiosero que ha adoptado Earnshaw y que simpatiza en sobremanera con Catalina, la hija de su benefactor. Ambos se crían juntos y mantienen una relación muy especial. No obstante, Hindley, el verdadero hijo de Earnshaw, no ve con buenos ojos al recién llegado y se muestra celoso de los favores que obtiene de su padre. Cuando este muere, Hindley empieza a maltratar y humillar a Heathcliff, abonando así el odio y rencor del personaje. Catalina conoce entonces a los niños Linton y tras una estancia de varias semanas en su casa vuelve cambiada, más refinada y caprichosa, haciendo sentir a Heathcliff desplazado y zafio. Esto será el desencadenante de los entresijos de la historia de amor y destrucción que alcanzará no solo a los personajes principales, sino también a sus descendientes.

Desde luego no es la primera vez que releo un clásico, pero éste me ha hecho reflexionar sobre las diferentes lecturas que podemos hacer de un libro a lo largo del tiempo. La primera vez que lo hice tendría 17 o 18 años y lo recuerdo como una desgarradora historia de amor. Me encantaba el personaje de Heathcliff, que se me figuraba como un personaje atormentado y herido que no podía evitar vengarse de aquellos que lo habían hecho sufrir, supongo que mi alma adolescente se sentía en sintonía con su dolor. Sin embargo, al volver a leer la obra, la lectura actual se ha visto confrontada con la antigua, y no hacía más que preguntarme dónde estaba ese romántico personaje que tanto me había marcado.

Esto me hace pensar en cuando recomendamos o marcamos lecturas clásicas a nuestros alumnos, ¿lo hacemos recordando al adolescente que fuimos o como el adulto que somos? Cuando comentamos las obras en clase ambos nos podemos enriquecer de la visión del otro, pero serán sin duda diferentes. Me ha pasado con otros clásicos, por ejemplo con Werther, cuyos personajes principales suscitaban horas de debate en mis clases ¿estaba enamorada Carlota? ¿Le daba ésta falsas esperanzas a Werther? Supongo que me pasará lo mismo con Cumbres borrascosas, así que esperaré con ilusión que mis alumnos me devuelvan a mi adolescencia.